Hay un aforismo oriental que viene a decir algo así como que la taza solo tiene sentido cuando está vacía. Creo que en cierto modo con la vida ocurre lo mismo, o al menos lo dejo para mi vida (evitaré extender mi ombligo a los confines del universo). A veces me encuentro con la necesidad de soltar lastre, de pasar página o incluso de cambiar de libro, de dejar equipaje en alguna estación de las que recorro en mi viaje vital para ir así más ligero y darme la posibilidad de recoger otras cosas, nuevas experiencias, vestirme con nuevas sensaciones que alimenten mis ganas de seguir viviendo, de rastrear el camino deleitándome en los rincones que me apetezcan.
Mi propia naturaleza me lo recuerda en cada respiración “espira si quieres de nuevo inspirar y oxigenarte”. Cuando la mano está abierta y relajada puede advertir el sentido del tacto mejor que cuando se aprieta en un puño que ciega las sensaciones. Cada vez que salgo a la montaña lo tengo presente, la cima no se encuentra arriba, está abajo al regresar de ella sano y salvo; y por supuesto que una retirada a tiempo es un triunfo. Cada vez soy más creyente del camino que de la meta.
Quizás por esto, supongo que entre otras muchas cosas, me siento a veces un poco en el aire, como un nómada vital, es decir, sin definir, sin terminar de asentarme; y cuando me preguntan qué hago en la vida o a qué me dedico me tengo que morder la lengua porque lo primero que me dan ganas de decir es “a intentar ser feliz sin joder a nadie”, pero claro, esa no es la respuesta esperada, aunque también es cierto que tampoco tengo un guión recurrente que satisfaga al interlocutor de turno como si le diese un buen hueso a un perro que se queda satisfecho mientras mueve feliz su rabo y a mí me deja tranquilo.
Y así andamos, desplegando velas, sintiendo el viento y por encima de todo como decía no recuerdo quien, intentando tomarme la vida no demasiado en serio porque total, nadie escapa vivo de ella.
Mi propia naturaleza me lo recuerda en cada respiración “espira si quieres de nuevo inspirar y oxigenarte”. Cuando la mano está abierta y relajada puede advertir el sentido del tacto mejor que cuando se aprieta en un puño que ciega las sensaciones. Cada vez que salgo a la montaña lo tengo presente, la cima no se encuentra arriba, está abajo al regresar de ella sano y salvo; y por supuesto que una retirada a tiempo es un triunfo. Cada vez soy más creyente del camino que de la meta.
Quizás por esto, supongo que entre otras muchas cosas, me siento a veces un poco en el aire, como un nómada vital, es decir, sin definir, sin terminar de asentarme; y cuando me preguntan qué hago en la vida o a qué me dedico me tengo que morder la lengua porque lo primero que me dan ganas de decir es “a intentar ser feliz sin joder a nadie”, pero claro, esa no es la respuesta esperada, aunque también es cierto que tampoco tengo un guión recurrente que satisfaga al interlocutor de turno como si le diese un buen hueso a un perro que se queda satisfecho mientras mueve feliz su rabo y a mí me deja tranquilo.
Y así andamos, desplegando velas, sintiendo el viento y por encima de todo como decía no recuerdo quien, intentando tomarme la vida no demasiado en serio porque total, nadie escapa vivo de ella.
7 comentarios:
Tus reflexiones son tan........ayyyyyy (suspiro). Sâddha llegarás y te detendrás donde te propongas.
Que suerte tiene esa preciosa niña de tener como padre a una persona como tu!!!, y aunque por el momento su isla sea su madre, tu formas parte de ese mundo que poco a poco irá descubriendo. Cógela mucho, besala mucho, siéntela mucho, y no la dejéis llorar...ay, eso de "no la cojas que luego se acostumbra", yo lo odiaba cuando me lo decían y los cojía, claro que los cojía, y se acostumbraron, y qué?, lo que disfrutamos de ese contacto físico no lo cambio por nada, y ellos, aunque no me lo hayan dicho, se que tampoco.
He terminado dándote consejos, y eso que no me gusta hacerlo porque a mi me han dado tantos que....en fin, que después te das cuenta que actuar tal y como te dicta tu instinto es algo que te da una fortaleza indescriptible, te hace crecer.
Un besazo y otro para tu niña y otro para tu chica, que esos momentos en los que se está deconstruyendo y encontrando lo que el cuerpo ha tardado nueve meses en construir, son de buaaaa jajajaja sniff ohhhhh agggggggg.....y no se cuantas cosas más.
Pues ya te digo:
Volando voy, volando vengo, por el camino, yo me entretengo...
"a intentar ser feliz sin joder a nadie"
Hasta ahora decía siempre "a disfrutar la vida", pero a partir de ahora te la plagio letra por letra. Eres enorme tio.
Ais... Por qué será que yo tampoco soporto ese tipo de preguntas, incluso cuando sé que me las hacen sin mala intención...
Besos...
Hola a tod@s.
Rosa y tus poemas son tan..... buffffff (resoplido de qué caña). Hace ya tiempo alguien que se encontraba en situación de desempleo me dijo que estaba parada pero no estaba quieta. Para mi eso fue un matiz de lo más esclarecedor en cuanto a una manera de ir por la vida. En cierto modo aquí me viene a pasar igual yo hago y no dejo de hacer, otra cosa es que "mi obligación" sea cumplir las expectativas de otros las mías, por eso mismo me pararé o caminaré o al menos intentaré hacerlo mientras tenga aliento cuando y como estime oportuno tal y como tú me dices.
En cuanto a Ana (así se llama la canija), mientras todo el mundo se pone la vacuna de la gripe A, yo me he puesto la vacuna contra los consejos de cómo tengo que educar a mi hija (y no lo digo por tí Rosa, ni mucho menos, sino por toda una turba de personajes que se consideran expertos pediatras, pedagogos, psicólogos evolutivos etc pero que no tienen ni un título de CCC y que por supuesto sus consejos no los aplican en carne propia pero dan recomendaciones como los reyes magos dan caramelos). Yo a mi hija la cojo todo lo que pide, porque si con cinco semanas que tiene la pobre ya le empiezo a poner cortapisas mal camino llevo. A veces más que mi hija parece un coala colgada de mis brazos (ya te mandare una fotillo pa que veas). Pero la verdad es que es una experiencia como bien tu dices única, que hoy por hoy no cambio por nada.
Un beso grande.
Amigo maño, reconozco que lo de a ser feliz sin joder lo pienso pero no lo digo por no quedar como un borde, pero lo que tu dices de "a disfrutar de la vida" creo que lo voy a ir diciendo como un primer paso para llegar a lo de "no joder a nadie"; osea que nos copiamos mutuamente o intercambiamos, omeóstasis o algo así se llama eso no?
Un abrazo grande para ti también. (Te tengo que mandar también alguna fotillo de la canija)
Espero que tengais la suficiente correa para aguantar este empalagamiento de papi novel, jejejeje.
A través, pues te tomo la palabra, a pesar de los pesares..."enamorao de la vida..."
Un abrazo grande.
Cris,yo el día que me ponga a recibir terapia (que ya está cerca)será un tema que trataré y que intentaré recolocar porque esa es una pregunta de todo un cuestionario que suele salir con cierta asiduidad y al que no se muy bien responder y me salen más ganas de ladrar y pegar un bocao en la pierna más que a satisfacer necesidades curiosas de otr@s.
Un abrazo gordoncho. (por cierto a ver si coincidimos vía messenger y charlamos y nos ponemos al día).
Besos a los cuatro.Gracias por vuestra compañía.
Parece que el ser humano ronda por los mismos temas, en algun momento de la vida... Yo ando reflexionando sobre el Soltar, el volar, el dejar....el fluir..
Claudia, pues no lo dudes, suelta, vuela, fluye, no te estanques. La vida es movimiento. Además nadie mejor que tú para llevar tu timón.
Gracias por pasar por aquí, ha sido un gusto conocerte.
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