jueves, 12 de julio de 2007

Ahora.


A veces, reparo en la sencillez de los días y es entonces cuando las palabras se agotan, la simplicidad del momento se bebe de un trago cualquier atisbo gramático y sólo quedamos el deslumbramiento y yo, formando un tanden inexpugnable. Todo se muta, se retuerce lo llano y cae el suelo hacia el cielo, no me queda entonces más remedio que licuarme entre la oscuridad de la luz y el ensordecedor silencio y esperar que este estado de lucidez pase aunque no exista el tiempo ni tan siquiera el espacio y no se qué o quién, me escupa nuevamente al péndulo que viaja del recuerdo al mañana.

lunes, 9 de julio de 2007

Venciendo a la victoria.


No me siento vencedora en nada, no quiero vencer a nadie,
sólo quiero encontrar mi lugar en el mundo y en la música sin que
ello suponga una competición. La palabra vencedora no va
conmigo. Pretendo ser verdadera, no engañar... ¿Por qué nuestras
manos son más importantes que las de alguien que trabaja la
tierra? Nosotros sólo hacemos pasar el rato a 2.000 personas en
una sala y ellos nos dan de comer. ¿Por qué nos tienen que
asegurar la manos a los pianistas y no a un agricultor? No debemos
guardar nuestras manos, tenemos que ponerlas en acción.
Maria Joao Pires (2003)

lunes, 2 de julio de 2007

EL VIAJE


Oriol Vall, que se ocupa de los recién nacidos en un hospital de Barcelona, dice que el primer gesto humano es el abrazo. Después de salir al mundo, al principio de sus dias, los bebés manotean, como buscando a alguien.

Otros médicos, que se ocupan de los ya vividos, dicen que los viejos, al fin de sus días, mueren queriendo alzar los brazos.

Y así es la cosa, por muchas vueltas que le demos al asunto, y por muchas palabras que le pongamos. A eso, así de simple, se reduce todo: entre dos aleteos, sin más explicación, transcurre el viaje.


Eduardo Galeano (bocas del tiempo)